Intel se encuentra en el centro de atención al ofrecer un paquete de despido voluntario que alcanza hasta los 500.000 euros para sus empleados en Irlanda.
Según Business Post, este paquete inicial ha sido propuesto para los trabajadores en la sede de Leixlip de la compañía. Un correo electrónico fue enviado la semana pasada, brindando a los empleados la opción de inscribirse antes del 23 de agosto.
De acuerdo con los términos sugeridos, aquellos empleados con más de dos años de antigüedad podrían recibir un pago de 5 semanas de salario por cada año trabajado. Para los que llevan menos de dos años en la empresa, el paquete ofrecerá entre 2 y 5 semanas de salario. La legislación laboral en Irlanda estipula un pago mínimo de 2 semanas de salario por cada año de servicio.
Algunos empleados podrían obtener hasta 500.000 euros (546.772 USD) si se inscriben y son aceptados por Intel. Los resultados para aquellos que participen en el programa se darán a conocer el 6 de septiembre, y la salida de la compañía estaría prevista para el 30 de septiembre.
Actualmente, Intel emplea a 4.900 personas en Irlanda. Según Tom’s Hardware, si la compañía reduce el 15% de su fuerza laboral en esa región, aproximadamente 730 empleados perderían sus trabajos. En el caso de que no haya suficientes voluntarios, la empresa podría verse obligada a implementar despidos forzosos.
Intel ha declinado hacer comentarios y aún no está claro cómo se aplicarán los paquetes de indemnización en otros lugares.
A principios de agosto, Intel anunció una reducción superior al 15% de su fuerza laboral. La compañía cuenta con 116.500 empleados a nivel global hasta el 29 de junio, sin contar algunas de sus subsidiarias. Se espera que el proceso de ajuste de personal finalice a finales de año. En declaraciones a The Verge, Intel mencionó que la cifra de recortes será «superior a los 15.000». Reuters estima que el 15% equivale a 17.500 personas, mientras que The Verge sugiere que el número de empleados afectados podría llegar a 19.000.
Intel se encuentra «en medio» de un ambicioso plan de reestructuración, enfocado en el desarrollo de procesadores con inteligencia artificial. En los últimos tiempos, la compañía ha sido superada por competidores como Nvidia, y enfrenta la amenaza de perder su posición ante AMD. En el sector de la fabricación de semiconductores, Intel está redoblando esfuerzos para recuperar la ventaja tecnológica perdida frente a TSMC, el mayor fabricante de chips por contrato del mundo.
